La vida no es sino un continuo fluir de paradojas

domingo, 5 de noviembre de 2017

APUNTES DE UN DOMINGO

APUNTES DE UN DOMINGO

Ya era hora de que pudiera entrar la lluvia en los temas de conversación y, sobre todo, en la realidad de nuestra tierra, seca y exhausta como nuestras mentes. Ayer tuvimos una buena serie de tormentas.

¿De qué va la cosa hoy?. Pues el primer pensamiento en esta mañana es que si el noreste ibérico pretendía ser el centro exclusivo y excluyente de atención: LO HA LOGRADO, no se habla de otra cosa en la prensa escrita y televisada del mundo.

En esta tierra siempre estamos en período electoral (no sé por qué se habrá establecido un tiempo para él) y, por lo mismo, de extrañas estrategias “para el pueblo pero a escondidas”, de muchas representaciones teatrales, de mucha “pose” para la foto, de falta de ética y de principios, de falta de ideología… de intereses espurios. Y en ello estamos. Ahora estamos en el momento de repartir las parejas para el baile.

En ese aspecto parece que en el centro de la Península se habla de apurar la legislatura, pero ¿los períodos legislados no estaban para eso, para que sirvieran de límites (iniciales y finales) a esos períodos?.


Preocupa el proceso de radicalización política y religiosa de los jóvenes y ya andan los “entendidos” con sus diatribas. Pues que no busquen, está en la familia y en la escuela y sus consecuencias, aparte de graves, duran mucho.

Lo que digo está en los actos de boicot y violencia con que se “responde” a los actos que intentan tener algunos partidos políticos en el noreste, en el silencio de los lugares públicos, en la quema de banderas, en los actos de exaltación (vean las imágenes de cierto estadio de fútbol de ayer en el noreste) o en LOS EDITORIALES PERIODÍSTICOS PACTADOS.

Lo que digo está también en las interpretaciones de ese grupo de 5 prófugos que tenemos por ahí, pagando a un abogado entre 500 y mil € la hora de servicio (debe bordar con puntilla sus actuaciones).

En medio están nuestra fuerzas de seguridad, que se quejan, no sin razón, que se juegan la vida por 1.400 € de sueldo. La verdad es que en ese aspecto las quejas podrían ser también de otros colectivos, por ejemplo, de nuestros investigadores, que pueden verse afectados por mil cosas por mil €, pero dejémoslo ahí.

No puedo cerrar esta entrada sin hablar de los que juegan a la “equidistancia”, también denominados “marqueses de entrambasaguas”, cuyo jefe de filas o mejor ejemplo es el experto en baile que maneja (pero poco) el timón de un partido denominado (muy a mi pesar) PSC. (Y digo muy a mi pesar porque, en su momento, defendí que hicieran como el PSP, diluirse en el histórico PSOE).


Dejemos que llueva.

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