La vida no es sino un continuo fluir de paradojas

lunes, 6 de noviembre de 2017

SIN ENTRAR EN DETALLES

SIN ENTRAR EN DETALLES

La primera frase que me he encontrado hoy en la prensa me ha dejado patidifuso. El Sr. (por decir algo) JOSEP MARÍA MAINAT nos ha hecho desayunar con este saludo: “Me cago en España, su justicia y el puto Borbón”, frase aleccionadora y que no rezuma ni odio, ni desprecio ni nada, sino solo alegría y concordia, por si faltaba algo.

Pero es que la segunda es del mismo estilo y proviene de la ideología contraria, aunque una a todos en una premonición global: “lo de los separatas y sus tontos útiles mesetarios, no va a acabar ni medio bien”.


La tercera me ha hecho gracia, la verdad, pues encierra una forma de definir la indefinición  (perdónese el juego de palabras) muy curiosa: “los nacional-hermafroditas de Inmaculada Colau”. Por cierto, y esto es una opinión personal, es una definición que le va muy bien a los que se columpian ideológicamente, como el PSC. Pero hemos dicho que no queremos entrar en detalles.

He visto también los comentarios a algunas encuestas (todas trufadas de intereses previos). De ellas entresaco estos datos, solo por el hecho de que suelen pasar desapercibidos: “apenas un 7% son hijos de padre y madre catalanes. Y que, por el contrario, el 63% se confiesen descendientes de progenitores no nacidos ambos en Cataluña.

Luego, queriendo salir de la bruma del terruño, he ido a caer en datos que a mi me preocupan (supongo que como a todos). Algunos de esos datos, que parece fuera de los intereses de los  medios, son:

* La pena de muerte aún se aplica en 58 países
*  En 75 países, la homosexualidad está penada con la cárcel, y en 13 de ellos, la condena puede llegar incluso a la muerte.


Da para pensar en los caminos que recorremos  con las palabras y con los hechos.

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